Cálculos renales

Son piedras formadas por compuestos minerales que se forman en el cálice del riñón. Cuando la orina es ácida, que es lo habitual, pueden ser de ácido úrico o sus sales y de oxalato de calcio. Si la orina es alcalina, los cálculos pueden ser de fosfato de calcio, carbonato de calcio o fosfato de amonio y magnesio. Su número puede variar de uno a varias decenas, y su tamaño, desde la llamada arenilla urinaria hasta el tamaño de un huevo de gallina. Cuando un cálculo comienza a descender por un uréter hacia la vejiga, se produce el llamado cólico nefrítico

Síntomas

Hay cálculos que no dan ningún síntoma, o bien producen dolor no muy fuerte a nivel del riñón, del uréter afectado o de la vejiga. Cuando hay dolores intensos se produce un cólico renal o del uréter. En este caso, el dolor se inicia bruscamente, es intenso continuo, con momentos cuando aumenta y otros cuando disminuye. Nace en la cintura y de allí se propaga hacia abajo y adelante, siguiendo el trayecto del uréter y llegando a la vejiga, y hasta la raíz del muslo. También puede haber vómito, distensión del intestino con gases, palidez y sudor. La crisis termina bruscamente cuando el cálculo llega a la vejiga, después de un período variable que puede ser de minutos a horas o días. En algunos casos se puede necesitar una intervención quirúrgica

Tratamiento

Los tratamientos que se recomiendan deben continuarse durante largos períodos para dar tiempo a que se eliminen o disuelvan los cálculos

Plantas medicinales recomendadas para Cálculos renales